Cuando recibimos una crítica, ya sea de una persona cercana y querida, de nuestro compañero de trabajo, de nuestro jefe o de nuestra pareja, tendemos a reaccionar de forma negativa. Por lo general, no nos suele gustar que critiquen lo que hacemos o pensamos, nos suele molestar que nos indiquen que hemos cometido un error o que tenemos un defecto.
Pero, ¿por qué nos sienta tan mal que nos critiquen?
Esto ocurre porque tendemos a interpretar la crítica de forma negativa, hostil e hiriente. Es decir, percibimos la crítica como un ataque. Un ataque hacia nuestra autoestima, nuestra autovalía y nuestro autoconcepto. Nos sentimos atacados en lo más profundo de nuestro ser.
Pero, ¿por qué a algunas personas no les afectan las críticas y a otras las hunden a un estado emocional negativo y devastador?
Esto ocurre debido a que lo que realmente nos afecta de una crítica es el mensaje negativo que nos transmitimos a nosotros mismos tras recibir una crítica. Es decir, si el mensaje que nos trasmite la crítica lo aceptamos, sin tener en cuenta si se ajusta a la realidad o no, nos lo creemos y le damos validez, nos estaremos transmitiendo a nosotros mismos que es cierto, que no podemos, que no somos lo suficientemente buenos o que no merecemos el afecto de la otra persona. Y son estos pensamientos negativos los que nos conducen a una alteración emocional.
Entonces, ¿qué podemos hacer para conseguir que una crítica no nos afecte de manera negativa?
Podemos aprender a responder a las críticas de forma asertiva, sin que supongan para nosotros un ataque personal, ni un ataque para la persona que nos critica. Parece complejo, pero si seguirnos los sientes pasos podemos llegar a conseguirlo.
Paso 1. Pensar de forma asertiva
Lo primero que tendremos que hacer es aprender a responder a las críticas de forma asertiva, es decir, aprender a expresar nuestras emociones sin miedo a ser fieles a uno mismo, sin sentirnos alterados por ellas y sin poner en juego nuestra autoestima.
Algunas ideas esenciales que será necesario que vayamos transformando poco a poco hacen referencia tanto a la actitud de exigencia que tenemos hacia nosotros mismos como hacia el que nos critica. Por otro lado, tendremos que empezar aceptar que tenemos derecho a equivocarnos, así como liberarnos de la necesidad de aprobación y empezar a considerar la crítica como un regalo.
Nos suele gustar tener la aprobación de los demás de lo que hacemos o pensamos. Este deseo sano de agradar a los demás, deja de serlo al transformarse es una exigencia y pensar “debo hacer las cosas bien para tener la aprobación de los demás, y si no lo consigo soy un inútil”, o “el no debería criticarme, es una mala persona y es terrible”.
Si somos capaces de aceptar que podemos equivocarnos, podremos aceptar la crítica como algo normal, ya que todos los seres humanos podemos cometer errores. Nadie es perfecto, podemos reconocer nuestro error y aprender de la situación. Del mismo modo, también puede ocurrir que sea la persona que nos critica la que cometa el error al criticarnos. Podremos aceptar de forma positiva esta situación, ya que es una persona que puede equivocarse.
La creencia de que para sentirnos bien tenemos que agradar a todo el mundo, no es realista y no nos ayuda a responder de forma asertiva, no nos permite ser fieles a nosotros mismos, nos ataca nuestra autoestima, nos hace sentir ansiedad y deteriora nuestras relaciones interpersonales.
Considerar las críticas como un regalo supone interpretarlas de forma positiva. Cuando la crítica es realista puede proporcionarnos información sobre nosotros mismos, en muchas ocasiones no somos conscientes de nuestros fallos. Tras una crítica podemos aprender nuevas habilidades, corregir errores y evitar problemas futuros.
Paso 2. Pedir detalles para comprender el punto de vista del otro
En muchas ocasiones la crítica es poco clara o ambigua, y nos resulta complicado entender el mensaje que el crítico nos quiere transmitir. En estos casos pedir detalles sobre lo que nos está transmitiendo puede ayudarnos a:
- ser conscientes de cómo nos perciben los demás
- detectar nuestros fallos
- descubrir el interés oculto del crítico
- aclarar malentendidos
- predisponer al crítico a nuestro favor
- cuestionar sus actitudes irracionales
Si en vez de responder a una crítica con una actitud defensiva, respondemos con empatía, intentando ver el punto de vista del otro, tratando de averiguar cómo nos ve la otra persona, qué es exactamente lo que nos quiere transmitir, pidiéndole que sea más concreto y que indique exactamente qué es lo que no le gusta, conseguiremos desarmar al crítico y transformar una interacción de una ataque en otra con un ambiente más colaborativo y constructivo, donde poder solucionar los problemas.
Paso 3. Mostrarte de acuerdo en lo posible
Ante una crítica siempre podemos mostrarnos de acuerdo con la parte de verdad del mensaje que nos transmiten. Incluso si la crítica no se ajusta la realidad, podemos mostrarnos de acuerdo con el derecho que tiene el crítico a ver las cosas desde su punto de vista y a sentirse como se siente como consecuencia de éste.
De esta forma conseguiremos predisponer al crítico a nuestro favor, que reconozca que ha sido demasiado duro al criticarnos, aumentará el respeto que tiene sobre nosotros, podremos manejar de forma asertiva un intento de manipulación ante una crítica manipulativa. En definitiva, conseguiremos desarmar al crítico. En poco tiempo se calmará y perderá el ímpetu con el que comenzó la crítica. Y de este modo, estará más preparado para dialogar y llegar a un acuerdo.
Paso 4. Explicar tu posición
A estas alturas, tu crítico se encontrará con una actitud mucho más positiva y su enfado se habrá reducido considerablemente. Es el momento de poder explicar tu opinión de cómo ves la situación y plantear alguna solución.
Siguiendo estos sencillos pasos te resultará más fácil aceptar las críticas de los demás. ¿Por qué? Porque queramos o no, todos podemos equivocarnos. Además, el hecho que nos lo indiquen es una oportunidad para aprender y mejorar. Si tienes dificultades a la hora de encajar las críticas, te sientes triste o tu estado de ánimo se ve afectado cuando te equivocas o tu rabia te impide responder de una forma adecuada, en ACM Psicólogos Madrid podemos ayudarte a responder a las críticas de forma asertiva.
Escrito por: Patricia Palacios
Psicóloga de ACM psicólogos